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Clinical Cardiology in the Elderly
CRÍTICA
DE
L I B RO S
Clinical Cardiology in the Elderly Editado por Eliot Chesler, MD (2.a ed.). Nueva York: Futura Publishing Company, Inc., 1999; 837 págs. 142 figuras; 165 dólares; ISBN: 0-87993-421-2.
El cambio demográfico que sufren la mayoría de las sociedades occidentales está modificando el escenario epidemiológico en el que la cardiología se desarrolla. El hecho de que las enfermedades cardiovasculares sean la primera causa de muerte en una era caracterizada por un acelerado envejecimiento de la población está llevando a una realidad clínica caracterizada por el rápido aumento en la edad media de los pacientes con enfermedades cardiovasculares y, sobre todo, a un espectacular incremento en la proporción de los pacientes muy ancianos. Esta situación plantea al cardiólogo actual situaciones clínicas nuevas desde el punto de vista fisiopatológico, diagnóstico, pronóstico y, especialmente, terapéutico. La relativa escasez en los conocimientos cardiológicos específicamente aplicados a los ancianos, la carencia de evidencias terapéuticas en este subgrupo de pacientes y la evidente limitación en la extrapolación de los resultados obtenidos en la investigación sobre pacientes más jóvenes hacen más necesaria la aparición de trabajos y libros de referencia que condensen las peculiaridades de la cardiología geriátrica. El texto de la segunda edición del libro Clini cal Cardiology in the Elderly de Eliot Chesler, es uno de los compendios más actuales y completos en este campo. Este libro, de 837 páginas, es una recopilación de 32 capítulos escritos por más de 40 expertos que abarcan los principales problemas cardiovasculares que afectan a los individuos de edad avanzada. Está dividido en 6 partes, la primera, «Envejecimiento cardiovascular» describe de manera extensa y práctica desde el punto de vista clínico las características del envejecimiento en la anatomía patológica (capítulo clásico, en el que se echan en falta algunas aportaciones recientes) y fisiología cardiovascular (muy bien planteado), así como las particularidades de la epidemiología, farmacología y electrocardiografía en los individuos de mayor edad. La segunda parte, «Enfermedades del corazón y vasculatura pulmonar» presenta en 12 capítulos, de manera pormenorizada, la esencia de varios síndromes cardiovasculares en los ancianos. Son objeto de revisión la endocarditis infecciosa, la hipertensión pulmonar, las valvulopatías y la cardiopatía isquémica (CI), que es el síndrome que merece mayor atención en este apartado con cinco capítulos (presentación y evaluación de la
CI, tratamiento de la CI aguda, empleo de intervenciones cardíacas y evolución del infarto agudo de miocardio, manejo médico de la angina estable y angioplastia y cirugía de revascularización coronaria), de los que destacan los dos primeros por su perspectiva, muy clínica, y el último por su rigor. Dos extensos capítulos analizan las arritmias cardíacas y la evaluación y el tratamiento del síncope en el anciano y, finalmente, otros dos capítulos evalúan exhaustivamente el manejo de las dislipemias y la hipertensión arterial en el anciano. La tercera parte, «Insuficiencia cardíaca», revisa en cinco capítulos las miocardiopatías (de modo genérico), los principios fisiopatológicos de la IC crónica, su tratamiento (en el que Gordon Pierpont, al igual que en su capítulo de manejo de la CI, hace una excelente aproximación clínica), el papel del ejercicio físico y el tratamiento en la IC y, finalmente, una aproximación al trasplante cardíaco en los menos ancianos. «Cirugía cardíaca» es el título de la cuarta parte y consta de tres capítulos, uno general, otro breve dedicado a la reparación valvular mitral y el tercero, el más interesante desde mi punto de vista, que discute de modo muy apropiado el crucial tema de la calidad de vida tras la cirugía cardíaca en los pacientes verdaderamente ancianos. La quinta parte, titulada «Cirugía no cardíaca», revisa los aspectos clínicos y terapéuticos del aneurisma aórtico abdominal y de la enfermedad vascular arterial periférica, concluyendo con un útil capítulo dedicado a la evaluación preoperatoria del riesgo cardiovascular en los ancianos sometidos a cirugía no cardíaca. La sexta parte, «Ética», es un apartado nuevo respecto a la primera edición y esencial en este libro. Es probablemente el que más lo distingue de los textos de cardiología geriátrica publicados previamente. En él se revisan los antecedentes históricos (desde una perspectiva anglosajona) del campo y se discuten con profusión aspectos tan específicos y actuales en el anciano como las polémicas respecto a la resucitación cardiopulmonar (indicaciones, eficacia, órdenes de no resucitar, etc.), eutanasia, ensayos clínicos y evaluación de los aspectos socioeconómicos que se entrecruzan en su manejo. Esta parte del libro se puede considerar como una referencia esencial para los cardiólogos y no cardiólogos que se enfrentan con frecuencia a los proble597
Rev Esp Cardiol Vol. 53, Núm. 4, Abril 2000; 597-598
mas no exclusivamente médicos de los enfermos cardiovasculares más ancianos, incluyendo las actitudes y decisiones en los momentos en que se aproxima el final de la vida. Por la amplitud y el rigor de su contenido científico, como por la relevancia de su planteamiento en los aspectos éticos, Clinical Cardiology in the Elderly es un libro que debería ser considerado como necesario no sólo para los cardiólogos específicamente interesados en la cardiología geriátrica, sino para todos aquellos
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Héctor Bueno.– Critical Cardiology in the Elderly
que tratan frecuentemente con pacientes de edad avanzada. Por este motivo, creo sinceramente que debería existir un espacio en las bibliotecas de todos los servicios modernos de cardiología para un libro de estas características. Héctor Bueno Zamora Unidad Coronaria. Hospital General Universitario Gregorio Marañón. Madrid.
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Clinical Cardiology in the Elderly Editado por Eliot Chesler, MD (2.a ed.). Nueva York: Futura Publishing Company, Inc., 1999; 837 págs. 142 figuras; 165 dólares; ISBN: 0-87993-421-2.
El cambio demográfico que sufren la mayoría de las sociedades occidentales está modificando el escenario epidemiológico en el que la cardiología se desarrolla. El hecho de que las enfermedades cardiovasculares sean la primera causa de muerte en una era caracterizada por un acelerado envejecimiento de la población está llevando a una realidad clínica caracterizada por el rápido aumento en la edad media de los pacientes con enfermedades cardiovasculares y, sobre todo, a un espectacular incremento en la proporción de los pacientes muy ancianos. Esta situación plantea al cardiólogo actual situaciones clínicas nuevas desde el punto de vista fisiopatológico, diagnóstico, pronóstico y, especialmente, terapéutico. La relativa escasez en los conocimientos cardiológicos específicamente aplicados a los ancianos, la carencia de evidencias terapéuticas en este subgrupo de pacientes y la evidente limitación en la extrapolación de los resultados obtenidos en la investigación sobre pacientes más jóvenes hacen más necesaria la aparición de trabajos y libros de referencia que condensen las peculiaridades de la cardiología geriátrica. El texto de la segunda edición del libro Clini cal Cardiology in the Elderly de Eliot Chesler, es uno de los compendios más actuales y completos en este campo. Este libro, de 837 páginas, es una recopilación de 32 capítulos escritos por más de 40 expertos que abarcan los principales problemas cardiovasculares que afectan a los individuos de edad avanzada. Está dividido en 6 partes, la primera, «Envejecimiento cardiovascular» describe de manera extensa y práctica desde el punto de vista clínico las características del envejecimiento en la anatomía patológica (capítulo clásico, en el que se echan en falta algunas aportaciones recientes) y fisiología cardiovascular (muy bien planteado), así como las particularidades de la epidemiología, farmacología y electrocardiografía en los individuos de mayor edad. La segunda parte, «Enfermedades del corazón y vasculatura pulmonar» presenta en 12 capítulos, de manera pormenorizada, la esencia de varios síndromes cardiovasculares en los ancianos. Son objeto de revisión la endocarditis infecciosa, la hipertensión pulmonar, las valvulopatías y la cardiopatía isquémica (CI), que es el síndrome que merece mayor atención en este apartado con cinco capítulos (presentación y evaluación de la
CI, tratamiento de la CI aguda, empleo de intervenciones cardíacas y evolución del infarto agudo de miocardio, manejo médico de la angina estable y angioplastia y cirugía de revascularización coronaria), de los que destacan los dos primeros por su perspectiva, muy clínica, y el último por su rigor. Dos extensos capítulos analizan las arritmias cardíacas y la evaluación y el tratamiento del síncope en el anciano y, finalmente, otros dos capítulos evalúan exhaustivamente el manejo de las dislipemias y la hipertensión arterial en el anciano. La tercera parte, «Insuficiencia cardíaca», revisa en cinco capítulos las miocardiopatías (de modo genérico), los principios fisiopatológicos de la IC crónica, su tratamiento (en el que Gordon Pierpont, al igual que en su capítulo de manejo de la CI, hace una excelente aproximación clínica), el papel del ejercicio físico y el tratamiento en la IC y, finalmente, una aproximación al trasplante cardíaco en los menos ancianos. «Cirugía cardíaca» es el título de la cuarta parte y consta de tres capítulos, uno general, otro breve dedicado a la reparación valvular mitral y el tercero, el más interesante desde mi punto de vista, que discute de modo muy apropiado el crucial tema de la calidad de vida tras la cirugía cardíaca en los pacientes verdaderamente ancianos. La quinta parte, titulada «Cirugía no cardíaca», revisa los aspectos clínicos y terapéuticos del aneurisma aórtico abdominal y de la enfermedad vascular arterial periférica, concluyendo con un útil capítulo dedicado a la evaluación preoperatoria del riesgo cardiovascular en los ancianos sometidos a cirugía no cardíaca. La sexta parte, «Ética», es un apartado nuevo respecto a la primera edición y esencial en este libro. Es probablemente el que más lo distingue de los textos de cardiología geriátrica publicados previamente. En él se revisan los antecedentes históricos (desde una perspectiva anglosajona) del campo y se discuten con profusión aspectos tan específicos y actuales en el anciano como las polémicas respecto a la resucitación cardiopulmonar (indicaciones, eficacia, órdenes de no resucitar, etc.), eutanasia, ensayos clínicos y evaluación de los aspectos socioeconómicos que se entrecruzan en su manejo. Esta parte del libro se puede considerar como una referencia esencial para los cardiólogos y no cardiólogos que se enfrentan con frecuencia a los proble597
Rev Esp Cardiol Vol. 53, Núm. 4, Abril 2000; 597-598
mas no exclusivamente médicos de los enfermos cardiovasculares más ancianos, incluyendo las actitudes y decisiones en los momentos en que se aproxima el final de la vida. Por la amplitud y el rigor de su contenido científico, como por la relevancia de su planteamiento en los aspectos éticos, Clinical Cardiology in the Elderly es un libro que debería ser considerado como necesario no sólo para los cardiólogos específicamente interesados en la cardiología geriátrica, sino para todos aquellos
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Héctor Bueno.– Critical Cardiology in the Elderly
que tratan frecuentemente con pacientes de edad avanzada. Por este motivo, creo sinceramente que debería existir un espacio en las bibliotecas de todos los servicios modernos de cardiología para un libro de estas características. Héctor Bueno Zamora Unidad Coronaria. Hospital General Universitario Gregorio Marañón. Madrid.