195.027
ORIGINALES
Multiplicidad diagnóstica en los trastornos de la personalidad Guillem Pailhez Vindual y Antonio Luis Palomo Nicolau Departamento de Salud Mental. Centros Asistenciales Dr. Emili Mira y López. Diputación de Barcelona. Santa Coloma de Gramenet. Barcelona. España.
Diagnostic multiplicity in personality disorders
INTRODUCCIÓN: La multiplicidad diagnóstica es un fenómeno ligado a la comorbilidad que se estudia en relación con la articulación entre los ejes I y II del DSM-IV-TR. Las investigaciones señalan que en los pacientes con trastorno límite tener múltiples diagnósticos en el eje I es más probable que en otros pacientes. El objetivo del estudio es examinar el fenómeno de la multiplicidad diagnóstica. PACIENTES Y MÉTODO: Se compara el número de diagnósticos al alta de 435 pacientes, divididos en 3 grupos: 94 con trastorno límite de la personalidad, 124 con otros trastornos de la personalidad y 220 con esquizofrenia, trastorno esquizofreniforme o trastorno esquizoafectivo. RESULTADOS: El 87,1% de los pacientes con trastorno límite y el 88,6% de los pacientes con otros trastornos de la personalidad recibieron más de un diagnóstico, a diferencia del 35,2% de los pacientes con diagnóstico “esquizo”. Los trastornos de la personalidad tuvieron 13,48 (intervalo de confianza [IC] del 95%, 8,2-22,1) veces más riesgo de recibir 2 o más diagnósticos que los pacientes con diagnóstico “esquizo”. Los trastornos de la personalidad tuvieron 27,7 y 9,6 veces más riesgo de recibir, respectivamente, los diagnósticos de trastorno del estado de ánimo (IC del 95%, 8,5-89,9) y trastorno mental no especificado (IC del 95%, 4,9-18,8) que los pacientes con diagnóstico “esquizo”. CONCLUSIONES: La multiplicidad diagnóstica es un fenómeno iatrogénico ligado a todos los trastornos de la personalidad y es un signo evidente de la dificultad para clasificar a estos pacientes.
INTRODUCTION: Diagnostic multiciplicity is related to comorbidity. This phenomenon has been studied in relation to the connection between axes I and II of the DSM-IV-TR. Research suggests that patients with borderline personality disorder (BPD) are more likely to have multiple axis I diagnoses than other patients. PATIENTS AND METHOD: The aim of this study was to examine the phenomenon of diagnostic multiplicity by comparing the number of discharge diagnoses in 435 patients divided into three groups: 94 with BPD, 124 with other personality disorders and 220 with schizophrenia, schizophreniform or schizoaffective disorder. RESULTS: A total of 87.1% of patients with BPD and 88.6% of those with other personality disorders received more than one diagnosis compared with 35.2% of patients with schizophrenia-related diagnoses. Patients with personality disorders had 13.48 times more risk of receiving two or more diagnoses (95% CI, 8.2-22.1), 27.7 times more risk of receiving a diagnosis of mood disorders (95% CI, 8.5-89.9) and 9.6 times more risk of receiving a diagnosis of non-specified mental disorders (95% CI, 4.9-18.8) than those with schizophrenia-related diagnoses. CONCLUSIONS: Diagnostic multiplicity is an iatrogenic phenomenon linked to all the personality disorders and is an obvious sign of the difficulty of classifying these patients.
Palabras clave: Trastorno de la personalidad. Trastorno límite de la personalidad. Comorbilidad. Multiplicidad diagnóstica.
Key words: Personality disorder. Borderline personality disorder. Comorbidity. Diagnostic multiplicity.
INTRODUCCIÓN Correspondencia: Dr. G. Pailhez Vindual. Departamento de Salud Mental (Unidad 4 de Hospitalización). Centros Asistenciales Dr. Emili Mira y López (Recinto Torribera). Avda. Prat de la Riba, 171. 08921 Santa Coloma de Gramenet. Barcelona. España. Correo electrónico:
[email protected]
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Es conocida la elevada comorbilidad entre los trastornos del eje I y los del eje II, de tal manera que se calcula que más de un 50% de los pacientes con diagnósticos en
Pailhez Vindual G et al. Multiplicidad diagnóstica en los trastornos de la personalidad
el eje I tienen también diagnósticos en el eje II1. Asimismo, otros autores han profundizado en el estudio de esta comorbilidad y han hallado asociaciones entre la mayoría de los trastornos del eje I y los trastornos de la personalidad2. En este sentido, el trastorno límite de la personalidad (TLP) es uno de los más paradigmáticos en cuanto a la magnitud de los trastornos comórbidos que presenta. Los trastornos del eje I descritos con mayor frecuencia como comórbidos al TLP han sido los trastornos del estado de ánimo, los de ansiedad, los relacionados con sustancias y los de la conducta alimentaria3,4, y algunos autores consideran que este patrón de comorbilidad es especialmente útil para el diagnóstico de TLP por sus elevadas sensibilidad (S = 0,73), especificidad (E = 0,73) y valor predictivo positivo (VPP = 0,89)5. Es conocida igualmente la elevada comorbilidad del TLP con los demás trastornos de la personalidad. Los trastornos de la personalidad que más frecuentemente se han hallado como comórbidos al TLP han sido los de la personalidad paranoide, antisocial, evitativo, dependiente y depresivo o derrotista, con algunas diferencias en la comparación por sexos6-8 y por subgrupos dentro del continuo de síntomas y la gravedad del mismo trastorno9. Además, la disminución de este patrón de comorbilidad parece un buen marcador de remisión del trastorno8,10. En cuanto a la comorbilidad con los demás trastornos de la personalidad, hay autores que señalan una línea similar al TLP tanto en calidad como en cantidad de diagnósticos comórbidos1. Entre los diagnósticos más frecuentes en el eje I, también se hallarían los mismos que con el TLP, excepto los trastornos psicóticos, que se observarían en elevada frecuencia2. Otro fenómeno ligado al de comorbilidad que ha sido motivo de estudio en cuanto a la articulación de ambos ejes es el de la multiplicidad diagnóstica. Algunos autores afirman que los pacientes con TLP tienen más posibilidades de recibir un mayor número de diagnósticos que los pacientes sin este diagnóstico3, de tal modo que un 80-90% de los pacientes con TLP u otros trastornos de la personalidad tienen un diagnóstico adicional y un 40% tiene 2 o más diagnósticos adicionales11,12. El objetivo de este trabajo es el estudio del fenómeno de la multiplicidad diagnóstica en tres distintas categorías de pacientes: pacientes con diagnóstico de trastorno límite de la personalidad, otros trastornos de la personalidad y, finalmente, esquizofrenia. El motivo principal de la elección de estos 3 grupos es comprobar si este fenómeno es exclusivo del TLP o se extiende a los demás trastornos de la personalidad. En este sentido, hemos comparado cada categoría de pacientes con el total de diagnósticos recibidos al alta y los diagnósticos por entidades según la clasificación DSM-IV-TR.
MATERIAL Y MÉTODO Mediante un diseño descriptivo y retrospectivo, se ha revisado los 1.145 diagnósticos DSM-IV-TR13 al alta de todos los pacientes ingresados durante el año 2002 en las unidades de agudos de un hospital psiquiátrico (Centres Assistencials Dr. Emili Mira i López; Santa Coloma de Gramenet, Barcelona) de aproximadamente 550 camas, 60 de las cuales son de agudos, que da cobertura a las necesidades de salud mental de unos 700.000 habitantes de la provincia de Barcelona. La muestra estuvo formada finalmente por 435 pacientes (el 38% del total), 218 con trastorno de la personalidad (94 con TLP y 124 con otros trastornos de la personalidad [otros TP]) y 220 con esquizofrenia, trastorno esquizofreniforme o trastorno esquizoafectivo [ESQ], en al menos uno de los diagnósticos recibidos. Los pacientes que recibían 2 o más diagnósticos motivo de estudio, fueron incluidos igualmente en cada uno de los grupos correspondientes. Los criterios de inclusión fueron ser mayor de 18 años de edad y recibir al alta los diagnósticos DSM-IV-TR motivo de estudio durante el año 2002. Los criterios de exclusión fueron ser menor de 18 años y recibir al alta cualquier otro diagnóstico. Es conocido el fenómeno de la multiplicidad diagnóstica entre los pacientes con TLP3. El motivo de elegir un segundo grupo de pacientes con trastorno de la personalidad no límite fue para estudiar si este fenómeno es también prevalente en el resto de los trastornos de la personalidad y forma parte, pues, de un espectro más amplio. Se añadió un tercer grupo de pacientes con esquizofrenia, trastorno esquizofreniforme o esquizoafectivo para estudiar este fenómeno en relación con la enfermedad en el eje I, ya que estas enfermedades permiten obtener un mayor tamaño muestral. El protocolo del estudio fue aprobado por el Comité de Ética del Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona. La fuente de los datos fueron las historias clínicas informatizadas tratadas estrictamente de manera anónima. Por este motivo, el comité de ética consideró que el protocolo podía llevarse a cabo sin la petición del consentimiento informado. El análisis descriptivo de los grupos se realizó mediante la media y la desviación estándar para las variables cuantitativas continuas (edad), las frecuencias y los porcentajes totales para las variables categóricas (sexo) y las frecuencias y los porcentajes relativos para las variables cuantitativas discretas (número de ingresos, número de diagnósticos totales y por entidades DSM-IV-TR). Se utilizó el ANOVA para la comparación de las variables cuantitativas, el test no paramétrico de KruskalWallis para las variables continuas discretas y el test de la 2 para las variables categóricas. Se realizó un análisis posterior de las diferencias estadísticamente significativas para comprobar qué pares de grupos diferían: para las variables continuas discretas se utilizó el test de Mann-Whitney y para las variables categóricas, el test de la 2. El nivel de significación estadística elegido fue p < 0,05. El grado de desigualdad entre los grupos en cuanto a la frecuencia de diagnósticos se midió mediante la odds ratio (OR) calculada con un intervalo de confianza (IC) del 95%. El tratamiento estadístico se realizó mediante un PC Pentium 4 con el programa SPSS para Windows, versión 11.0. Sólo se admitieron para el análisis los diagnósticos DSMIV-TR que se codifican en los ejes I o II. Con la finalidad de facilitar el estudio descriptivo y comparativo, los diagnósticos se agruparon en las siguientes entidades DSM-IV-TR: trastorPsiq Biol. 2007;14(3):92-7
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TABLA 1. Características demográficas de la muestra (n = 435) TLP (n = 93) % Sexo Varones Mujeres Ingresos Diagnósticos Edad (años), media ± DE
n
50,5 47 49,5 46 38,6 170 40 262 35,7 ± 8,6
Otros TP (n = 123) %
n
55,3 68 44,7 55 29,9 174 38,3 332 41,1 ± 14,3
ESQ (n = 219) %
n
69,4 152 30,6 67 31,5 327 21,7 335 38 ± 12,1
Total (n = 435) %
n
61,4 267 38,6 168 100 671 100 929 38,4 ± 12,3
2
p
12,5
0,002*
8,7 141,8 F = 5,4
0,013* 0,000* 0,005*
ESQ: esquizofrenia, trastorno esquizofreniforme y trastorno esquizoafectivo; Otros TP: otros trastornos de la personalidad; TLP: trastorno límite de la personalidad. *Diferencia estadísticamente significativa.
nos del estado de ánimo, de ansiedad, relacionados con sustancias, de la conducta alimentaria, somatomorfos, del control de los impulsos, adaptativos, esquizofrenia y otros trastornos psicóticos, trastornos disociativos, mentales no especificados (no psicóticos), trastornos de la personalidad, retraso mental, trastornos motores inducidos por medicamentos y, finalmente, otros diagnósticos. Para el trastorno relacionado con sustancias, se admitieron los diagnósticos de abuso, dependencia, intoxicación y abstinencia.
RESULTADOS En la tabla 1 se observan las características demográficas estudiadas en el total de la muestra y por cada grupo. Se hallaron diferencias estadísticamente significativas entre los 3 grupos en relación con la proporción de varones y mujeres (2 = 12,49; df = 2; p = 0,002), la edad (F = 5,403; df = 2; p = 0,005), el número de ingresos (2 = 8,73; df = 2; p = 0,013) y el número de diagnósticos (2 = 141,76; df = 2; p = 0,000). En un análisis posterior por parejas de grupos de la variable sexo, los grupos que difirieron significativamente fueron los TLP con esquizofrenia (2 = 10,06; df = 1; p = 0,002) y los otros TP con esquizofrenia (2 = 6,84; df = 1; p = 0,009]. En cuanto a las variables edad y número de ingresos, los grupos que difirieron significativamente fueron los TLP con otros TP (edad, Z = –2,52; p = 0,012; número de ingresos, Z = –2,9; p = 0,004). En cuanto al número de diagnósticos, se hallaron diferencias significativas en la comparación por parejas de los grupos TLP con esquizofrenia (Z = –9,55; p = 0,000) y otros TP con esquizofrenia (Z = –10,23; p = 0,000). No se hallaron diferencias significativas en el resto de las comparaciones. No se hallaron correlaciones estadísticamente significativas entre el número de diagnósticos y la edad (r = 0,04; p = 0,36) ni con el número de diagnósticos y el número de ingresos (r = 0,005; p = 0,91). Las figuras 1 y 2 muestran los porcentajes de las variables número de ingresos y número de diagnósticos, respectivamente, para los 3 grupos de pacientes. El 87,1 94
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y el 88,6% de los pacientes de los grupos TLP y otros TP, respectivamente, recibieron más de un diagnóstico. Sin embargo, sólo el 35,2% de los pacientes del grupo esquizofrenia recibieron más de un diagnóstico. La desigualdad entre los grupos en cuanto al número de diagnósticos recibidos al alta supuso que los pacientes con trastornos de la personalidad (incluye los grupos TLP y otros TP) tuvieran 13,48 veces más riesgo de recibir 2 o más diagnósticos que los pacientes del grupo esquizofrenia (IC del 95%, 8,2-22,1). En la tabla 2 se observan las frecuencias y los porcentajes de los diagnósticos por entidades DSM-IV-TR para cada grupo de la muestra. Se hallaron diferencias estadísticamente significativas en la comparación entre los 3 grupos en: trastornos del estado de ánimo (2 = 61,95; df = 2; p < 0,001), trastornos de ansiedad (2 = 13,74; df = 2; p = 0,001), trastornos relacionados con sustancias (2 = 20,83; df = 2; p < 0,001), trastornos de la conducta alimentaria (2 = 7,2; df = 2; p = 0,027), trastornos somatomorfos (2 = 6,67; df = 2; p = 0,036), trastornos adaptativos (2 = 27,66; df = 2; p < 0,001), trastornos mentales no especificados (no psicóticos) (2 = 58,45; df = 2; p < 0,001) y trastornos motores inducidos por medicamentos (2 = 7,68; df = 2; p = 0,022). No se hallaron diferencias significativas en el resto de las entidades diagnósticas. En un análisis posterior por parejas de grupos, se hallaron diferencias estadísticamente significativas entre los grupos otros TP y esquizofrenia en relación con los trastornos del estado de ánimo (Z = –7,21; p < 0,001), trastornos de ansiedad (Z = –3,81; p < 0,001), trastornos relacionados con sustancias (Z = –3,23; p = 0,001), trastornos de la conducta alimentaria (Z = –2,68; p = 0,007), trastornos somatomorfos (Z = –2,44; p = 0,015), trastornos adaptativos (Z = –5,46; p < 0,001), trastornos disociativos (Z = –2,06; p = 0,039), trastorno mental no especificado (Z = –6,69; p < 0,001) y trastornos motores inducidos por medicamentos (Z = –2,40; p = 0,016). Entre los grupos TLP y esquizofenia se hallaron diferencias estadísticamente significativas en relación con los
Pailhez Vindual G et al. Multiplicidad diagnóstica en los trastornos de la personalidad
Grupo diagnóstico TLP Otros TP ESQ
Porcentaje
Porcentaje
30
20
Grupo diagnóstico TLP Otros TP ESQ
30
20
10
10
0
0 2
4 6 8 Número de ingresos
10
1
2
3 4 5 Número de diagnósticos
6
Figura 1. Porcentajes de la variable número de ingresos por cada grupo. ESQ: esquizofrenia, trastorno esquizofreniforme y trastorno esquizoafectivo; Otros TP: otros trastornos de la personalidad; TLP: trastorno límite de la personalidad.
Figura 2. Porcentajes de la variable número de diagnósticos por cada grupo. ESQ: esquizofrenia, trastorno esquizofreniforme y trastorno esquizoafectivo; Otros TP: otros trastornos de la personalidad; TLP: trastorno límite de la personalidad.
trastornos del estado de ánimo (Z = –7,76; p < 0,001), trastornos de ansiedad (Z = –2,67; p = 0,008), trastornos relacionados con sustancias (Z = –4,30; p < 0,001), trastornos de la conducta alimentaria (Z = –2,67; p = 0,008), trastornos adaptativos (Z = –4,39; p < 0,001), trastornos disociativos (Z = –1,99; p = 0,047) y trastorno mental no especificado (Z = –7,24; p < 0,001). No se hallaron diferencias significativas en la comparación por parejas entre los grupos TLP y otros TP. En la tabla 3 se expresan las OR y los IC del 95% de recibir 2 o más diagnósticos para cada entidad DSM-IVTR del trastorno de la personalidad (incluye al grupo TLP) respecto al grupo esquizofrenia. Los trastornos somatomorfos no alcanzaron la significación estadística (incluyen el valor 1 en el intervalo de confianza). Estar en los grupos TLP u otros TP resultó un factor de protección contra recibir diagnósticos de trastornos motores inducidos por medicamentos.
los varones con esquizofrenia. Además, los pacientes del grupo TLP son más jóvenes que los del grupo otros TP. En este sentido, en otro estudio5 con muestras hospitalarias, los pacientes con TLP resultaron igualmente más jovenes y con mayor proporción de mujeres que los pacientes con otros TP. Esta igualdad de proporciones en ingresos de varones y mujeres en los trastornos de la personalidad puede explicarse por dos razones: mayor vivencia de gravedad del trastorno entre los mismos pacientes varones y los profesionales en salud mental, y/o distinta expresión de los síntomas según el sexo dentro del continuo del trastorno5 que implique mayores ingresos entre los varones. Los pacientes del grupo TLP ingresaron más durante el año 2002 que los pacientes con otros TP. Además, los pacientes con trastorno de la personalidad reciben significativamente más diagnósticos que los pacientes con esquizofrenia. En el trabajo de Zimmerman et al3, los pacientes con TLP tienen el doble de riesgo de recibir 3 o más diagnósticos en el eje I que los pacientes psiquiátricos sin ese trastorno. Sin embargo, no llegan a estudiar si este fenómeno también abarca a los demás trastornos de la personalidad. En nuestro estudio, no hay diferencias en cuanto al número de diagnósticos totales recibidos al alta entre los pacientes del grupo TLP y los del grupo otros TP. Sin embargo, los pacientes con trastornos de la personalidad tienen 13 veces más riesgo de recibir 2 o más diagnósticos en ambos ejes que los pacientes del grupo esquizofrenia. Además, el hecho de re-
DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES En relación con las características demográficas de la muestra, cabe señalar las diferencias significativas en los 3 grupos en cuanto a la proporción de ambos sexos, la edad, el número de ingresos y el número de diagnósticos totales. En los grupos TLP y otros TP destaca la igualdad en la proporción de ingresos de ambos sexos, en contraposición a la mayor proporción de ingresos de
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TABLA 2. Frecuencias y porcentajes de los diagnósticos por entidades DSM-IV-TR para cada grupo Diagnósticos DSM-IV-TR
TLP %
Trastorno del estado de ánimo 12,2 Trastorno depresivo mayor 4,2 Trastorno distímico 6,1 Trastorno depresivo no especificado 0,4 Trastornos bipolares 1,5 Trastorno de ansiedad 1,1 Trastornos relacionados con sustancias 22,5 Alcohol (abuso, dependencia, intoxicación, 10,3 abstinencia) Otras (abuso, dependencia, intoxicación, 12,2 abstinencia) Trastornos de la conducta alimentaria 1,1 Trastornos somatomorfos 0,4 Trastorno del control de los impulsos 1,1 Trastornos adaptativos 3,1 Esquizofrenia y otros trastornos psicóticos 4,2 Esquizofrenia 0,4 Trastorno esquizofreniforme 0 Trastorno esquizoafectivo 1,1 Trastorno delirante 0,4 Trastorno psicótico breve 0,4 Trastorno psicótico inducido por sustancias 0,8 Trastorno psicótico no especificado 1,1 Trastornos disociativos 1,1 Trastorno mental no especificado 13 (no psicótico) Trastorno de la personalidad 38,2 Trastorno paranoide de la personalidad 0 Trastorno esquizoide de la personalidad 0 Trastorno esquizotípico de la personalidad 0 Trastorno antisocial de la personalidad 0,4 Trastorno límite de la personalidad 35,5 Trastorno histriónico de la personalidad 1,9 Trastorno narcicista de la personalidad 0 Trastorno de la personalidad por evitación 0 Trastorno de la personalidad por dependencia 0 Trastorno obsesivo-compulsivo de la personalidad 0,4 Trastorno de la personalidad no especificado 0 Retraso mental 1,5 Trastornos motores inducidos 0,4 por medicamentos Otros 0
Otros TP
ESQ
2
p
61,9
0,000
13,7 20,8
0,001 0,000
7,2 6,7 0,8 27,7
0,027 0,036 NS 0,000
4,7 58,4
NS 0,000
0 1 9 13
1,4 7,7
NS 0,022
1
0,7
NS
n
%
n
%
n
32 11 16 1 4 3 59 27
10 3,9 3,3 1,5 1,2 2,7 17,8 8,2
33 13 11 5 4 9 59 27
0,9 0,3 0,0 0,3 0,3 0 17,9 7,4
3 1 0 1 1 0 60 25
32
9,7
32
10,4
35
3 1 3 8 11 1 0 3 1 1 2 3 3 34
1,2 1,5 0,6 4,8 5,4 2,1 0 0,3 1,2 0,3 0,6 0,9 1,2 11,8
4 5 2 16 18 7 0 1 4 1 2 3 4 39
0 0,3 1,2 0 65,8 50,6 3,3 11,3 0,6 0 0 0 0,3 3,3
0 1 4 0 221 170 11 38 2 0 0 0 1 11
100 0 0 0 1 93 5 0 0 0
41,7 3,9 0,6 1,2 4,8 2,1 7,9 0,3 0,3 1,2
138 13 2 4 16 7 26 1 1 4
3,6 0,6 0,3 0,3 0,3 1,2 0,3 0 0,3 0
12 2 1 1 1 4 1 0 1 0
1 0 4 1
0,9 18,4 0,9 0
3 61 3 0
0 0,3 2,7 3,9
0
0,3
1
0,3
ESQ: esquizofrenia, trastorno esquizofreniforme y trastorno esquizoafectivo; NS: sin significación estadística; Otros TP: otros trastornos de la personalidad; TLP: trastorno límite de la personalidad.
cibir más diagnósticos no depende de la edad ni del número de ingresos. Por lo tanto, es de interés señalar que el riesgo de recibir múltiples diagnósticos no es exclusivo del TLP, sino que abarca a otros TP. Esta multiplicidad diagnóstica en los TLP respecto a los pacientes con esquizofrenia depende en nuestro estudio de los siguientes diagnósticos DSM-IV-TR: trastornos del estado de ánimo, trastornos de ansiedad, trastornos relacionados con sustancias, trastornos de la conducta alimentaria, trastornos adaptativos, trastornos disociativos y trastorno mental no especificado. Los pacientes del grupo otros TP reciben, además de los mencionados, los diagnósticos de trastorno somatomorfo y 96
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los de trastorno motor inducido por medicamentos. Por lo tanto, los pacientes con otros TP parecen tener menos efectos secundarios del tratamiento neuroléptico, probablemente por su menor prescripción por parte de los facultativos en comparación con los demás grupos. Los diagnósticos que reciben con más probabilidad diagnóstico de trastornos de la personalidad respecto a los pacientes con equizofrenia son los trastornos del estado de ánimo (OR = 27,7) y los trastornos mentales no especificados (OR = 9,6). Así pues, la multiplicidad diagnóstica es un fenómeno iatrogénico ligado a los trastornos de la personalidad y un signo evidente de la dificultad que existe para clasifi-
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TABLA 3. Odds ratio e intervalos de confianza (IC) de la multiplicidad diagnóstica en cada entidad DSM-IV-TR de la comparación de los grupos trastorno de la personalidad y relacionado con la esquizofrenia Trastorno
OR
IC del 95%
Trastorno del estado de ánimo Trastorno de ansiedad Trastornos relacionados con sustancias Trastorno de la conducta alimentaria Trastornos somatomorfos Trastorno adaptativos Trastorno mental no especificado (no psicótico) Trastornos motores inducidos por medicamentos
27,7 2,1 2,6 2,0 6,2 2,1 9,6
8,5-89,9 1,9-2,3 1,7-4 1,9-2,3 0,7-52.2 1,9-2,4 4,9-18,8
0,1
0,01-0,8
car estos pacientes. Nuestra opinión es que las causas de este fenómeno parecen ser multifactoriales: a) la complejidad y la heterogeneidad psicopatológica de los pacientes con trastorno de la personalidad; b) la mayor utilización del diagnóstico transversal respecto al longitudinal en el diagnóstico psiquiátrico, y c) la posible limitación del modelo categórico para clasificar estos trastornos. La gravedad de estos pacientes, junto con una sobreutilización del diagnóstico transversal, puede producir diagnósticos adicionales en el eje I que sean más propios de rasgos psicopatológicos llevados al extremo. Es conveniente señalar que este estudio tiene limitaciones: el uso de escalas validadas para establecer el diagnóstico mediante un diseño prospectivo habría mejorado la validez de las conclusiones. También el uso de una muestra de pacientes ambulatorios, menos graves, permitiría conocer mejor el alcance de este fenómeno. Sin embargo, los resultados de este estudio aportan datos sobre la comorbilidad entre ambos ejes que pueden ser desarrollados en trabajos futuros.
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