Tratamiento endoscópico de las estenosis uretrales

Tratamiento endoscópico de las estenosis uretrales

 E – 41-322 Tratamiento endoscópico de las estenosis uretrales L. Bastien, B. Boillot La estenosis uretral es una patología frecuente que afecta a ...

417KB Sizes 0 Downloads 107 Views



E – 41-322

Tratamiento endoscópico de las estenosis uretrales L. Bastien, B. Boillot La estenosis uretral es una patología frecuente que afecta a varones de cualquier edad. Su causa más frecuente es traumática. Provoca trastornos obstructivos y debe buscarse cuando existen síntomas urinarios. Definir con precisión las características de la estenosis es fundamental para escoger el tratamiento óptimo. El tratamiento de las estenosis uretrales puede realizarse por vía endoscópica o por vía abierta. El tratamiento endoscópico suele escogerse como primera elección porque es menos invasivo. Existen varias técnicas que deben adaptarse al tipo de estenosis. La técnica de uretrotomía endoscópica ha evolucionado muy poco en los últimos 30 a˜ nos y la aparición del láser y de las endoprótesis no ha modificado en gran medida el pronóstico y la tasa de recidiva de las estenosis. Aunque la vía endoscópica suele escogerse como primera elección, no debe repetirse si se produce una recidiva, porque puede empeorar los resultados de la cirugía abierta. El riesgo principal es la recidiva de la estenosis. © 2016 Elsevier Masson SAS. Todos los derechos reservados.

Palabras clave: Uretra; Estenosis; Uretrotomía interna; Láser; Endoscopia urinaria

 Definición y diagnóstico

Plan ■

Introducción

1



Definición y diagnóstico Definición y factores de riesgo Diagnóstico

1 1 1



Tratamiento endoscópico Preparación quirúrgica Técnicas de uretrotomía interna Otras técnicas endoscópicas

2 2 2 3



Tratamiento postoperatorio Postoperatorio inmediato Tratamiento a medio plazo

4 4 4



Resultados

4



Conclusión

5

 Introducción La estenosis uretral es una patología frecuente que afecta a varones de cualquier edad. Su origen más frecuente es traumático. Provoca trastornos obstructivos y debe buscarse cuando existen síntomas urinarios. El tratamiento de las estenosis uretrales puede realizarse por vía endoscópica o por vía abierta. El tratamiento endoscópico suele escogerse como primera elección porque es menos invasivo. Existen varias técnicas que deben adaptarse al tipo de estenosis. EMC - Urología Volume 48 > n◦ 1 > marzo 2016 http://dx.doi.org/10.1016/S1761-3310(15)76274-2

Definición y factores de riesgo La uretra se divide en seis porciones: fosa navicular, uretra peneana, uretra bulbar, uretra membranosa, uretra prostática y cuello vesical. Las estenosis del cuello no se describen en este artículo (Fig. 1). La estenosis uretral es una disminución del diámetro de la uretra debido a una constricción por una cicatriz uretral. Su prevalencia en la población se estima en el 0,9% [1] . Cualquier proceso que lesione el epitelio uretral y/o el cuerpo esponjoso subyacente puede provocar una cicatrización excesiva, con reducción del calibre de la uretra [2] . El origen más frecuente es el traumatismo uretral, en la mayoría de los casos iatrogénico (45%). La resección transuretral de la próstata (RTUP) para volúmenes mayores de 70 ml con corriente bipolar provoca una cantidad significativamente mayor de estenosis uretral que la resección con corriente monopolar (20% frente al 2,2%; p = 0,012) [3] . La estenosis también puede ser postinfecciosa (20%), congénita o idiopática (30%) [1] . La proporción de liquen escleroatrófico (balanitis xerótica obliterante) de la uretra está seguramente subestimada, en particular en las estenosis que han recidivado muchas veces o, peor aún, sometidas a dilataciones repetidas.

Diagnóstico Síntomas Los pacientes refieren trastornos obstructivos relacionados con la reducción de calibre de la uretra: disminución

1

E – 41-322  Tratamiento endoscópico de las estenosis uretrales

largo plazo. En la actualidad, se piensa que si una estenosis no después de una primera ha recidivado menos de un a˜ uretrotomía, es más razonable proponer otra alternativa terapéutica, de las que la más lógica es la uretroplastia en cualquiera de sus variantes [4] .

Preparación quirúrgica

1 2 3

4 5 6

Figura 1. Anatomía de la uretra. 1. Cuello vesical; 2. uretra prostática; 3. uretra membranosa; 4. uretra bulbar; 5. uretra peneana; 6. fosa navicular.

A

B

Figura 2. Flujometría. A. Curva monofásica normal. B. Curva «en meseta».

del chorro urinario, prolongación del tiempo miccional, polaquiuria, incontinencia posmiccional, etcétera. Se debe buscar una estenosis uretral en caso de infecciones urinarias de repetición (prostatitis y orquiepididimitis).

Exploración física Carece de utilidad para el diagnóstico. En cambio, la flujometría es sugestiva, con una curva de tipo disúrico denominada en «meseta» (Fig. 2).

Pruebas complementarias Cuando puede realizarse una endoscopia, es fundamental para confirmar el diagnóstico. Permite establecer la no localización precisa de la estenosis, su aspecto, su tama˜ y, si se puede pasar a través de la estenosis, su longitud. La uretrocistografía retrógrada y miccional (UCRM) permite precisar la localización. Es absolutamente indispensable antes de cualquier intervención para analizar la uretra proximal. En caso de estenosis incompleta, permite medir con precisión la longitud de la estenosis aunque no se pueda atravesar con el cistoscopio e informa sobre la uretra proximal (¿segunda estenosis?). El aspecto de la estenosis observado en la exploración retrógrada y miccional permite establecer el diagnóstico de certeza.

 Tratamiento endoscópico El tratamiento endoscópico o uretrotomía interna suele ser el tratamiento de primera elección. El tratamiento endoscópico es poco invasivo. Ha mantenido su lugar en el arsenal terapéutico. La distribución de los procedimientos entre cirugía endoscópica y abierta parece haberse mantenido estable desde la década de 1990, lo que confirma la importancia de esta vía de acceso [4] . Sin embargo, si se produce una recidiva, no debe repetirse demasiado para no empeorar los resultados de la cirugía abierta que, aunque es menos invasiva, tiene mejores resultados a

2

La intervención se realiza en el quirófano bajo anestesia general o locorregional. El paciente se coloca en posición de litotomía. Ésta no debe ser exagerada, porque puede causar una isquemia de la uretra. Antes de ello, se debe comprobar la esterilidad de la orina mediante un estudio citobacteriológico de la orina (ECBO) reciente. Si existe una infección, tanto sintomática como asintomática, debe tratarse de forma eficaz según el antibiograma durante al menos 48 horas y realizar un control urinario. Las distintas técnicas endoscópicas provocan una hiperpresión urinaria y, en caso de infección, un paso de microorganismos a la circulación general. Por último, se recomienda suspender cualquier tratamiento anticoagulante oral, cambiándolo por heparina de bajo peso molecular (HBPM). Cuando se pueden suspender los tratamientos antiagregantes plaquetarios, es preferible, pero no indispensable.

Técnicas de uretrotomía interna Uretrotomía interna con bisturí frío Incisión a ciegas con el uretrótomo de Otis Esta técnica puede realizarse para las estenosis uretrales peneanas retromeáticas sintomáticas, o si existe una estenosis que impida la introducción del resector durante una RTUP o una resección transuretral de la vejiga (RTUV). No se recomienda para las estenosis bulbares. Requiere un calibre meático mínimo de 12-14 Ch (unidades Charrière) para poder introducir el aparato. El uretrótomo de Otis se introduce en la uretra hasta un punto proximal a la estenosis. A continuación, se realiza una rotación hacia el cuadrante externo, lo que despliega verticalmente el uretrótomo y produce la salida de la hoja. Después, se retira la lámina del uretrótomo, lo que produce la incisión de la estenosis. Esto provoca una uretrorragia en la mayoría de las ocasiones. A continuación, se realiza un control endoscópico para confirmar la incisión de la estenosis y la ausencia de estenosis uretral proximal. La compresión a nivel de la incisión con una sonda uretral permite la interrupción de la hemorragia, que siempre es cuantiosa. Algunos urólogos utilizan esta técnica sistemáticamente para «preparar» el paso de un resector. Esta actitud no se ha evaluado. Incisión con control visual mediante el uretrótomo de Sachse Material. El uretrótomo de Sachse consta de un gatillo que acciona una hoja fría. Está provisto de un canal de trabajo que permite colocar un fiador, incluso una sonda nalarse que no se ha realizado ninguna ureteral. Debe se˜ modificación notable en estos endoscopios en los últimos nos. El problema que suele encontrarse es el desgaste 50 a˜ de las hojas de corte, que muy pocas veces logran realizar una incisión de bordes netos. Endoscopia e identificación del trayecto. Durante la uretroscopia, se localiza y se intuba el trayecto de la estenosis con una sonda ureteral del calibre 4 Ch o con un fiador para evitar desvíos. En la mayoría de los casos, el uretrótomo se extrae a continuación, dejando el fiador o la sonda como medida de seguridad. Cuando el trayecto es fino y difícil de cateterizar, se puede utilizar una hoja perforada a través de la que se coloca el fiador. EMC - Urología

Tratamiento endoscópico de las estenosis uretrales  E – 41-322

Incisión. Se realiza clásicamente en la posición horaria de las 12, accionando el gatillo. La abertura de la estenosis permite la progresión del uretrótomo en la uretra. La incisión debe permitir el paso, procurando no perforar la uretra. Esto provocaría una extravasación de líquido de lavado, lo que teóricamente obligaría a interrumpir el procedimiento. Sin embargo, la experiencia demuestra que se trata de una descripción un poco ideal: cuando ya se ha realizado una uretrotomía, la pared uretral se vuelve tan fibrosa y retraída que se atraviesa con mucha facilidad por la hoja. Una vez atravesada la estenosis, se explora el resto de la uretra y la vejiga. No se deben perder de vista los bordes de la uretra, sobre todo si existe una estenosis larga para evitar cualquier falsa vía, sobre todo si no se ha podido colocar una sonda ureteral. Cuando se puede llegar hasta la vejiga, se realiza una exploración descendente de la uretra para controlar la ausencia de una falsa vía, que condicionaría el sondeo postoperatorio. Estenosis difíciles. La dificultad de estos casos se puede prever a partir de la anamnesis del paciente y de la exploración radiológica. Si existe una estenosis bulbar larga con un trayecto fino, no se debe olvidar que la uretra presenta una angulación natural de 90◦ . No se debe proseguir la incisión en el eje de la uretra peneana, pues existiría un riesgo de penetrar en el espacio prerrectal e incluso de realizar una lesión rectal que provocaría una fístula uretrorrectal. El trayecto uretral, sobre todo subprostático, se sitúa en la posición horaria de las 12, en la vertical de la uretra, pero en algunos varones muy jóvenes o, por el contrario, que presenten una hipertrofia benigna de próstata (HBP), este eje puede variar en gran medida, por lo que las proyecciones radiológicas laterales son de gran utilidad, ya que informan de la angulación bulbomembranosa. Si existe una estenosis grave con obturación completa de la uretra, ya se habrá colocado un catéter suprapúbico en la etapa preoperatoria. En la mayoría de los casos, se trata de una estenosis bulbomembranosa (después de una RTUP) o medioprostática (después de una fractura de la pelvis). Este catéter suprapúbico puede utilizarse para inyectar azul de metileno o un producto de contraste en la vejiga con el fin de ayudar a encontrar la uretra proximal. Si existe una obliteración completa, se puede recurrir a otro artificio técnico: se puede introducir un fibroendoscopio por vía anterógrada colocando un trocar de laparoscopia de 5 mm a nivel intravesical bajo control visual. El fibroendoscopio se introduce lo más abajo posible en sentido proximal a la obliteración. La luz del fibroendoscopio facilita la identificación retrógrada de la uretra proximal y la incisión se realiza a continuación bajo control visual con el uretrótomo. Esta técnica requiere dos cirujanos [5] . Informe quirúrgico. La estenosis debe describirse con precisión en el informe quirúrgico: número y aspecto de las estenosis, longitud de cada estenosis y su localización respecto al esfínter o al veru montanum, con la posibilidad de precisarlas con ayuda de las marcas de la sonda ureteral de referencia, que están distanciadas entre sí 1 centímetro.

que la hoja fría, sino sólo un método adecuado de sección. Se pueden utilizar el uretrótomo de Sachse sin la hoja fría no calibre con un canal de trao un cistoscopio de peque˜ bajo. Esto es particularmente útil para las uretrotomías en ni˜ nos. En primer lugar, se coloca una sonda ureteral o un fiador, que se deja como medida de seguridad, sin olvidar que el láser corta con mucha facilidad los fiadores. A continuación, se introduce la fibra del láser por el canal de trabajo. La incisión se realiza en la posición horaria de las 12. Las precauciones para evitar una perforación de la uretra son idénticas a las citadas previamente.

Uretrotomía interna con láser

Dilatación con balón Un balón de dilatación se coloca sobre un fiador hidrófilo después de realizar una endoscopia. A continuación, el balón se infla para dilatar la estenosis con control radioscópico durante 5 minutos. Se realiza una endoscopia de control y se coloca una sonda del calibre 16 Ch al final del procedimiento. El uso de esta técnica para las estenosis de la uretra anterior menores de 1,5 cm permitiría una mejora significativa del flujo máximo sin recidiva ni tratamiento complementario en el 68% de los pacientes [10] . Sin embargo, se trata de una técnica aparentemente poco validada, por lo que no es recomendable.

Material El tipo de láser más utilizado es el de YAG:Holmio. Las fibras más adecuadas para la uretra son las de gran calibre de 550 micras, porque son más eficaces. La energía utilizada es de 1.200-1.400 mJ y la frecuencia es de 10-13 Hz [6] . Hasta donde saben los autores de este artículo, no se ha publicado la utilización de fibras muy finas para obtener una incisión muy precisa. Técnica La técnica quirúrgica es idéntica a la de la hoja fría. El láser no puede considerarse un método superior ni inferior EMC - Urología

Casos particulares El láser se puede utilizar cuando existe una estenosis de una anastomosis uretrovesical, tras una prostatectomía radical, pues permite realizar una incisión en la posición horaria de las 4, las 8 y las 12. Algunos autores han propuesto realizar una vaporización cuando existe abundante tejido cicatricial a nivel de la estenosis sin provocar una lesión profunda, con el fin de permitir una reepitelización proveniente de ambos bordes. Estos resultados no se han confirmado [7] . La utilización del láser puede ser más fácil en comparación con la hoja fría, sobre todo en las recidivas o en los casos más difíciles donde el manejo de dicha hoja es problemático. Sin embargo, los resultados de la uretrotomía con láser no son mejores que los de la técnica realizada con hoja fría [8] .

Uretrotomía interna con asa en T Se efectúa con un resector que tiene un asa en T, denominada en ocasiones electrodo-punta, respetando los principios descritos previamente. Se puede utilizar en las estenosis de las anastomosis uretrovesicales si no se dispone de láser. No se recomienda en los demás casos.

Otras técnicas endoscópicas Dilatación uretral Dilatación de la uretra con bujías La estenosis se dilata utilizando a ciegas bujías rígidas de diámetro progresivamente creciente bajo anestesia local. Esta técnica está absolutamente contraindicada en caso de infección urinaria. Se trata de un procedimiento que se utiliza desde el origen de la urología en las estenosis leves, pero pocas veces es curativo y se produce una recidiva a las 4-6 semanas, que suele obligar a realizar nuevas dilataciones [1] . Pueden provocar falsas vías, hemorragias, infecciones y un riesgo de agravación de la estenosis. La tasa de éxito es tan sólo nos [7] . del 20% a los cuatro a˜ Las dilataciones son una alternativa para los pacientes con enfermedades concurrentes graves y con una esperanza de vida limitada o tras el fracaso de la uretroplastia. A pesar de su finalidad paliativa, esta técnica proporciona grandes beneficios en todo el mundo [1, 9] .

3

E – 41-322  Tratamiento endoscópico de las estenosis uretrales

Prótesis temporales o permanentes Endoprótesis permanentes Son prótesis inspiradas en la cardiología intervencionista y se comenzaron a utilizar en la década de 1990. Cada vez se utilizan menos debido a su incarceración fibrosa en la pared uretral, con recidiva y empeoramiento de las condiciones locales. En la actualidad, no parecen ser recomendables. Sin embargo, la técnica de colocación es idéntica a la de las endoprótesis temporales descrita a continuación. Endoprótesis uretrales temporales Debido a los efectos de las endoprótesis permanentes, se pueden colocar endoprótesis temporales en prevención de la recidiva. Son idénticas a las endoprótesis permanentes. Las endoprótesis termoactivas son de nitinol. Presentan la particularidad de distenderse a la temperatura corporal y de contraerse a temperaturas más bajas. La colocación se realiza después de una uretroscopia y una posible uretrotomía interna, para poder atravesar la estenosis con la no endoprótesis. Se coloca a nivel de la estenosis y su tama˜ se adapta a la longitud de la estenosis. Debe sobrepasar al menos en 0,5 cm el límite distal de la estenosis. Si la colocación ha sido incorrecta o si es preciso retirarla, la inyección de suero frío hace que la endoprótesis se retraiga y se pueda movilizar. Algunos equipos proponen realizar la colocación de la endoprótesis en dos tiempos: una uretrotomía y después un sondeo vesical durante 15 días, con la colocación de la endoprótesis bajo anestesia local. Esto permitiría disminuir el riesgo de migración de la endoprótesis [11] . La colocación temporal de la endoprótesis durante un plazo de 3-12 meses permitiría mantener una luz uretral normal durante más tiempo que una uretrotomía o una nalar que las estenosis dilatación simple [12–14] . Hay que se˜ de la uretra peneana no son las mejores indicaciones para estas endoprótesis. Sin embargo, la tasa de complicación de estas endoprótesis es elevada (40% de molestias, 75% de incontinencia posmiccional, migración, recidiva de estenosis). No están indicadas en las estenosis complicadas o largas y el riesgo de fracaso tras la uretroplastia es del 50% [7] . La indicación de colocación de una endoprótesis es infrecuente y se reserva sobre todo para las estenosis cortas rápidamente recidivantes en pacientes frágiles o que rechacen la uretroplastia.

 Tratamiento postoperatorio Postoperatorio inmediato Elección de la sonda vesical Al final de la intervención, se coloca una sonda vesical de silicona (bien tolerada por los tejidos) del calibre 16 o 18 Ch. El calibre de la sonda varía según los equipos (de 18 a 24), aunque los resultados publicados sobre los distintos calibres de catéter no permiten concluir que dicho ne un papel significativo tras una uretrocalibre desempe˜ tomía [15] . No es necesario utilizar una sonda de tres vías, pues la hemorragia proviene de la uretra y no de la vejiga. Sin embargo, si se produce una hemorragia cuantiosa en un paciente que tome anticoagulantes, se puede colocar dicha sonda como medida de seguridad, sobre todo si el sondeo es complicado (dificultad de cambio de la sonda en el postoperatorio en caso de tener que retirar coágulos).

Colocación de la sonda Si existe un riesgo de falsa vía, se recomienda utilizar la semivaina del uretrótomo para colocar la sonda a nivel intravesical. Sin embargo, la utilización de la vaina limita no de la sonda a un calibre 16 Ch. el tama˜

4

Otra solución para realizar un sondeo sin falsa vía es introducir la sonda sobre el fiador. Esto necesita realizar una perforación de la punta de la sonda, por lo general con una aguja de punción de gran calibre, a través de la que se introduce el fiador: se recomienda realizar una incisión na posible en el extremo distal y comprobar lo más peque˜ a continuación el balón de la sonda.

Duración del sondeo Varía de un día (estenosis poco fibrosa, corta y sin complicaciones peroperatorias) a 3 días, e incluso una semana en caso de estenosis múltiple y recidivante, muy fibrosa, con recuperación difícil del trayecto, e incluso con realización de una falsa vía peroperatoria. La utilidad de los sondeos prolongados durante varias semanas, que se realizan con frecuencia, no se han validado por el momento.

Catéter suprapúbico Se puede dejar un catéter suprapúbico como medida de seguridad en el postoperatorio, sobre todo si ya estaba presente, pero debe pinzarse. El mantenimiento de una luz uretral de un calibre satisfactorio se puede atribuir en parte a la presión hidrostática creada por la micción. Si no existe presión hidrostática en el conducto epitelial, se produce una regresión progresiva de su diámetro. Si el catéter se despinza, la orina pasa por vía suprapúbica, con recidiva de la estenosis uretral [15] .

Tratamiento a medio plazo Seguimiento Se recomienda realizar un control de la flujometría varias semanas después de la intervención. No está indicado realizar endoscopias reiteradas. Se efectúa una endoscopia o una UCRM si existen dudas sobre una recidiva con signos clínicos (disuria o disminución del chorro urinario) o en las pruebas complementarias (disminución del flujo máximo).

Colocación de tutores uretrales Después del tratamiento endoscópico de una estenosis de la uretra y si existe un riesgo elevado de recidiva, se puede proponer a los pacientes la colocación de tutores uretrales. A continuación, se realizan autosondeos con una frecuencia de tres veces por semana, que se distancian progresivamente (tres/semana durante 15 días, después 2/semana durante un mes y luego 1/semana durante un mes). Si existen dificultades para el autosondeo o si aparece un «roce» después de distanciar los sondeos, se efectúa un control y el intervalo entre la colocación del tutor se reduce. Según algunos autores, esta técnica barata reduce el riesgo de recidiva al mantener el calibre de la uretra [16] . Se puede objetar que esta técnica conlleva un riesgo de extender a la uretra un posible liquen escleroatrófico o, al menos, un proceso de traumatismos repetidos. Por este motivo, parece que esta técnica, que ha proporcionado grandes beneficios, no debe proponerse sistemáticamente.

 Resultados Los resultados de la uretrotomía dependen del tipo y de la longitud de la estenosis, de su tiempo de evolución y de los tratamientos previos. La uretrotomía se prefiere para las estenosis cortas (< 1 cm) o en los pacientes fráginos es del 47,8% frente les [17] . La tasa de éxito a los 5 a˜ al 86,4% en el caso de la uretroplastia. La mayoría de las recidivas se producen en los 12 meses posteriores a la uretrotomía interna. El plazo de aparición de la recidiva es un factor pronóstico principal. Si la recidiva se produce a los 3 meses, la eficacia de una segunda uretrotomía interna es limitada y la de una tercera es nula [9, 18] . EMC - Urología

Tratamiento endoscópico de las estenosis uretrales  E – 41-322

La tasa de éxito de la uretroplastia es más elevada cuando se realiza precozmente después del fracaso de la uretrotomía. Después de un fracaso, se debe evitar repetir la operación en muchas ocasiones y habrá que establecer la indicación de una uretroplastia para mejorar los resultados (mejor vascularización tisular). Cuanto más se repite la uretrotomía, menores son las posibilidades de éxito [15] . Sin embargo, en la actualidad no existen suficientes estudios aleatorizados para determinar cuál es la mejor intervención inicial en términos de eficacia, de efectos secundarios y de coste [19] .

[6]

 Conclusión

[10]

Aunque la vía endoscópica suele escogerse como primera elección, no debe repetirse si se produce una recidiva, porque puede empeorar los resultados de la cirugía abierta. Definir con precisión las características de la estenosis es fundamental para escoger el tratamiento óptimo. El riesgo principal es la recidiva de la estenosis. La técnica de uretrotomía endoscópica ha evolucionado muy nos y la aparición del láser y de las poco en los últimos 30 a˜ endoprótesis no ha modificado en gran medida el pronóstico y la tasa de recidiva de las estenosis. Sin embargo, la distribución de los procedimientos entre cirugía endoscópica y abierta parece mantenerse estable desde la década de 1990. El uso de la hoja fría mantiene su lugar en el arsenal terapéutico.

[11]

 Bibliografía

[15]

[1]

[16]

[2] [3]

[4] [5]

Tritschler S, Roosen A, Füllhase C, Stief CG, Rübben H. Urethral stricture: etiology, investigation and treatments. Dtsch Arztebl Int 2013;110:220–6. Campbell-Walsh. Urology. Philadelphia: WB Saunders; 20001029–127. Komura K, Inamoto T, Takai T, Uchimoto T, Saito K, Tanda N, et al. Incidence of urethral stricture after bipolar transurethral resection of the prostate using TURis? Results from a randomized trial. BJU Int 2015;115:644–52. Granieri MA, Peterson AC. The management of bulbar urethral stricture disease before referral for definitive repair: have practice patterns changed? Urology 2014;84:946–9. Hosseini SJ, Kaviani A, Vazirnia AR. Internal urethrotomy combined with antegrade flexible cystoscopy for management of obliterative urethral stricture. Urol J 2008;5:184–7.

[7] [8] [9]

[12] [13]

[14]

[17]

[18]

[19]

Kamp S, Knoll T, Osman MM, Köhrmann KU, Michel MS, Alken P. Low-power holmium:YAG laser urethrotomy for treatment of urethral strictures: functional outcome and quality of life. J Endourol 2006;20:38–41. Oosterlinck W. Treatment of bulbar uretral strictures. A review, with personal critical remarks. Scient World J 2003;3:443–54. Jin T, Li H, Jiang LH, Wang L, Wang KJ. Safety and efficacy of laser and cold knife urethrotomy for urethral stricture. Chin Med J 2010;123:1589–95. Naudé AM, Heyns CF. What is the place of internal urethrotomy in the treatment of urethral stricture disease? Nat Clin Pract Urol 2005;2:538–45. Vyas JB, Ganpule AP, Muthu V, Sabnis RB, Desai MR. Balloon dilatation for male urethral strictures “revisited”. Urol Ann 2013;5:245–8. Atesci YZ, Karakose A, Aydogdu O. Long-term results of permanent memotherm urethral stent in the treatment of recurrent bulbar urethral strictures. Int Braz J Urol 2014;40:80–6. Wong E, Tse V, Wong J. Durability of MemokathTM urethral stent for stabilisation of recurrent bulbar urethral strictures – medium-term results. BJU Int 2014;113(Suppl. 2):35–9. Jordan GH, Wessells H, Secrest C, Squadrito Jr JF, McAninch JW, Levine L, et al. Effect of a temporary thermo-expandable stent on urethral patency after dilation or internal urethrotomy for recurrent bulbar urethral stricture: results from a 1-year randomized trial. J Urol 2013;190:130–6. Yoon CY, Chae JY, Kim JW, Kim JW, Oh MM, Park HS, et al. Transurethral resection of fibrotic scar tissue combined with temporary urethral stent placement for patients with in anterior urethral stricture. Int Braz J Urol 2014;40:576–7. Oosterlink W, Lumen N. Traitement endoscopique des sténoses de l’urètre. EMC (Elsevier Masson SAS, Paris), Techniques chirurgicales – Urologie, 41-322, 2006. Levine LA, Engebrecht BP. Adjuvant home urethral balloon dilation for the recalcitrant urethral stricture. J Urol 1997;158(3 Pt 1):818–21. Tinaut-Ranera J, Arrabal-Polo MÁ, Merino-Salas S, Nogueras-Oca˜na M, López-León VM, Palao-Yago F, et al. Outcome of urethral strictures treated by endoscopic urethrotomy and urethroplasty. Can Urol Assoc J 2014;8:E16–9. Steenkamp JW, Heyns CF, de Kock ML. Internal urethrotomy versus dilation as treatment for male urethral strictures: a prospective, randomized comparison. J Urol 1997;157:98–101. Wong SS, Aboumarzouk OM, Narahari R, O’Riordan A, Pickard R. Simple urethral dilatation, endoscopic urethrotomy, and urethroplasty for urethral stricture disease in adult men. Cochrane Database Syst Rev 2012;(12):CD00693.

L. Bastien ([email protected]). Centre lémanique d’urologie, chemin de Pré-Fleuri 6, 1006 Lausanne, Suisse. B. Boillot. Service d’urologie, CHU de Grenoble, BP 217, 38043 Grenoble cedex 09, France. Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo: Bastien L, Boillot B. Tratamiento endoscópico de las estenosis uretrales. EMC - Urología 2016;48(1):1-5 [Artículo E – 41-322].

Disponibles en www.em-consulte.com/es Algoritmos

EMC - Urología

Ilustraciones complementarias

Videos/ Animaciones

Aspectos legales

Información al paciente

Informaciones complementarias

Autoevaluación

Caso clinico

5